El día de hoy, que tenemos nuestro 192° aniversario patrio, le sucedió al celular de mi mamá, un Palm Pixi, quizá algo antiguo para los tiempos actuales de "smartphones" pero útil para la labor requerida.
Efectivamente la pantalla ya no respondía hágase lo que se haga, lo reiniciamos varias veces y nada. Es más hubo que buscar como hacerlo ya que normalmente para reiniciarlo hay que usar la pantalla para confirmar la operación. Sin embargo, fue una bendición llegar a este enlace.
Varios comentarios indicaban que había que usar la garantía y llevarlo a servicio técnico, pero el consejo (comprobado y validado por mi) de poner el equipo pegado a la TV apagada (ojo, tiene que ser una TV antigua con tubo de rayos catódicos CRT) con las pantallas mirándose entre sí y luego encenderlo con el teléfono colocado ahí, fue lo más efectivo.
Al encenderlo se libera una carga estática, la cual me pasó a mi a través del cuerpo por cierto, pero... la pantalla... volvió a funcionar.
Así una vez más algo que parecía perdido, vuelve a ser recuperado. Si tienes un equipo inservible en tu cajón, pruébalo y comenta.
Lo que si me pregunto es si lo mismo hubiera servido en los momentos en los que mi ex-Lumia 900 presentaba falla similar.